Como es lógico primero debemos decidir qué escena vamos a representar, después prepararemos la plantilla que nos servirá para pintarla.
Con el aerógrafo siempre hay que tener mucho cuidado de no pulverizar otras zonas, para ello empapelamos y tapamos todo lo que sea susceptible de poder mancharse.
La verdad es que pintar con aerógrafo es muy delicado y requiere cierta destreza, pero el resultado compensa el trabajo.
Como podeis ver todo el terreno del decorado, incluso las olas del lago, está hecho con escayola.
Al lago hay que darle muuuchas manos de alkil (éste hay que darlo en capas finas pues tarde en secar), aunque no pueda apreciarse en las fotos también le podemos dar forma para simular oleaje y el agua chorreando por la nave.
El cesped es comprado, para pegarlo damos una capa de cola blanca, esparcimos el cesped (con un colador fino), aplastamos un poco poniendo un papel encima (para que se integre con la cola) y dejamos que seque para retirar el exceso.